lunes, 26 de mayo de 2014

SALIDA DE EMERGENCIA

Si la vida se ha obstinado en cerrarte las puertas de la felicidad, no le insistas. Deja de tocar. Si una mañana la vida decide abrir sus puertas a personas extrañas para que se encuentren a sí mismos, no preguntes por qué. Tampoco reniegues. Si al final sientes que tu existencia no resulta ser el hermoso paisaje compuesto de pajaritos, mariposas y un arcoíris que invitan a seguir caminando y, en cambio te das cuenta que es un invierno de frías temperaturas con cielo nublado a perpetuidad, no te decepciones. Aún te espera la otra cara de la moneda. Anímate, alienta a tu alma con tu alma. Busca una salida de emergencia. Sonríele al mal tiempo y limpia con un Windex la ventana de tu vida. Esfuérzate por quitar las machas que enmugrecen el vidrio de tu suerte, de repente das un paso en falso y, mientras caes, la vida decide abrir sus puertas para que encuentres por fin el sentido a la acción de respirar.